Huerteando el barrio


La Huerta “Orgazmika” de Caballito nació en febrero de 2002, en el contexto de la postcrisis de diciembre de 2001, a instancias de un grupo de vecinos y una asamblea popular de la zona. Dicho colectivo se presenta como una huerta comunitaria, autogestionada y orgánica, y funciona en un terreno próximo a la estación de tren. Durante más de seis años este espacio abierto a la participación de todos supo fomentar tanto la biodiversidad como la cultura a nivel general, mediante ciclos de cine y talleres de todo tipo. Sin embargo, el 29 de agosto pasado el Gobierno de la Ciudad decretó el desalojo de la huerta. Para enterarnos cuál es la situación actual hablamos con Gonzalo, participante de este proyecto- realidad local.
- ¿Cómo nació la huerta?
- Empezó por la pila que le pusieron unos vecinos para limpiar lo que antes era un basural cerca de las vías. Y después se armó una huertita, que fue creciendo con gente que venía a participar de la iniciativa. Nos fuimos acercando a la gente del Centro Cultural La Sala (Avellaneda 645), y un poco se empezaron a fusionar ambos proyectos…
- ¿Cuándo surgen los conflictos?
- Los problemas empezaron a partir del 2007, cuando se inició la remodelación de la Plaza “Giordano Bruno”. Ahí nos enteramos que se pensaba anexar el terreno de la huerta a la plaza para hacer un canil. Ante esto, nosotros le planteamos al gobierno que tuviera en cuenta nuestra situación. Como no nos respondieron volvimos a hacer nuevas presentaciones porque veíamos que la obra avanzaba. Y un día de febrero llegamos a la huerta y nos encontramos con que ya habían iniciado la obra adentro de la huerta. Así fue que decidimos hacer un acampe por tiempo indeterminado, para evitar que se destruyera el espacio, e iniciamos una actuación en la Defensoría del Pueblo porque el gobierno no nos había respondido…
- Un proceso que estalla el 3 de setiembre pasado…
- Claro, nota va y nota viene, resulta que ese día nos llegó una intimación del Gobierno de la Ciudad a desocupar la huerta “en los próximos cinco días” (violando la Ley 1925 por la cual el Ministerio de Justicia está obligado a mediar entre la comunidad y sus representantes), ante lo cual presentamos un recurso de reconsideración. ¿Y qué decimos? Que lo nuestro no es una ocupación ilegal, acá no hay usurpación ni nada. Y cada vez que un funcionario o vecino nos acusa a los otros vecinos que solidariamente trabajamos en la huerta de usurpadores, está cometiendo delito de difamación sobre un delito de calumnia ya existente por parte de los funcionarios que nos habían acusado. En segundo lugar, como no pueden hablar de ocupación ilegal hablan de ocupación ilegítima. Y nosotros decimos que no se puede considerar ilegítima la ocupación desde el momento en el cual nosotros hemos hecho pleno ejercicio de nuestro derecho a gozar de un ambiente sano (según reza el artículo 26 de la Constitución de la Ciudad). Y nadie tiene que pedir permiso para hacer ejercicio de su derecho. En todo caso tendrás que dar aviso si es que afecta a terceros. Pero en este caso estamos diciendo que limpiamos lo que antes era un basural. Hicimos pleno ejercicio de ese derecho, además de brindar diversas prestaciones. Por eso estamos convencidos que es legítimo que exista en el barrio un espacio como el que propone la huerta, y no vamos a bajar los brazos.


“La Huerta Orgázmika está al servicio de quienes deseen interiorizarse en labores ecológicas, además de alimentarse y disfrutar de actividades culturales. Por eso decimos que este decreto de desalojo está viciado de nulidad por ser inconstitucional: de quitarse la huerta se afectaría un montón de derechos. Este espacio está abierto a todo el mundo, es una propuesta de intervención comunitaria sin fines de lucro de un sitio que estuvo contaminado por la intervención privada y lucrativa”.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Para mas info acerca de la Huerta Orgazmika: http://www.orgazmika.blogspot.com

saludos y gracias.