Breve

Una última hoja que cae y lentamente se desliza por el aire para dar en el pasto que perdió su color.
Antes de llegar a la tierra remonta su vuelo a cada instante, como si algo la llamara a volver constantemente al lugar de donde vino, al lugar en donde brotó. Mientras se desliza gira livianamente rodeando su vida y en su pequeño organismo se guardan sus recuerdos que no se tratan más que de oxígeno, tormentas, días y noches estrelladas.
Aún hoy que cae conserva su brillo en donde el sol se refleja y mientras se desliza recuerda sin conciencia cada minuto vivido.
Una extensa pero tan corta, una vida que duró lo que dura en llegar a la madre tierra, en donde dejará su último brillo, sobre las raíces de lo que le dio la vida.
Cae rodeando su árbol, su cuerpo. Lo roza con sus bordes y sus pliegues, es su abrazo, su despedida, dejándole así su energía para un nuevo brote.
Llega a la tierra alejándose de su último brillo, mimetizándose con el pasto otoñal y degradándose para transformarse en cenizas que desaparecerán habiendo fortalecido a la madre tierra con todas sus virtudes.

DESIREÉ SALGUEIRO